Peñalba de Ávila
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Credencial
Dónde sellar la credencial
Puedes sellar la credencial en:
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Casa consistorial. Martes de 10 AM – 2 PM
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Sonia Garcinuño Jimenez – 626 83 92 48
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Bar Peñalba
Alojamiento
Alojamiento para peregrinos
Peñalba de Ávila ofrece un espacio para peregrinos que lo necesiten:
Salón municipal (requiere reserva previa, llamar a Sonia 628 83 92 48)
- Baño
- Ducha: no
- Colchones: no
- Calefacción: no
Restauración y alimentación
Dónde comer y/o comprar comida
- Bar Peñalba (abierto los fines de semana).
Qué visitar
Descubre qué visitar
- Iglesia Parroquial y Ermita del Cristo de Santa Teresa.
- Despoblado de Garoza.
Salud
Centro de Salud y farmacias
Centro de Salud
- Consulta del médico: Martes y Jueves 12h.
- Consulta enfermería: Lunes y Viernes 12h.
Información
Descubre más
Horario de misas
Domingos 11 o 12 AM, alternando.
Festivos 11 AM
Acerca de Peñalba
En el término municipal de Peñalba de Ávila terminan las tierras altas de las últimas estribaciones de la Sierra de Ávila y comienzan las campiñas de la Moraña sembradas de cereal.
En el paisaje llano de las eras, que cambia al ritmo del ciclo del crecimiento del trigo, encontrarás la Ermita del Santísimo Cristo de Santa Teresa, en la que se venera una imagen de la Santa arrodillada ante un Crucificado:
“Mirad que importa esto mucho más que yo os sabré encarecer. Poned los ojos en el Crucificado y haráseos todo poco. Si Su Majestad nos mostró el amor con tan espantables obras y tormentos, ¿cómo queréis contentarle con sólo palabras? ¿Sabéis qué es ser espirituales de veras? Hacerse esclavos de Dios, a quien, señalados con su hierro que es el de la cruz, porque ya ellos le han dado su libertad, los pueda vender por esclavos de todo el mundo, como Él lo fue; que no les hace ningún agravio ni pequeña merced” (7 Moradas, 4, 8)
Puedes visitar la iglesia de San Vicente Mártir, con su cabecera de sillarejo y su espadaña de sillería de granito del siglo XVI; el Potro de herrar, una construcción existente en muchos pueblos para herrar las pezuñas de las vacas y bueyes de tiro y de labor; el Palomar de barro, encalado, con pretensiones decorativas que recordará la comparación de santa Teresa al llamar a sus conventos palomarcitos.