Origen de la Ruta Teresiana

La ruta teresiana “De la cuna al sepulcro” es una ruta de peregrinación entre Ávila y Alba de Tormes (Salamanca) creada al hilo de la celebración del “V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús”, año 2015.

Sus ideadores, el padre Carmelita D. Antonio González y los empresarios de la Asociación Turismo La Moraña (Ávila), elaboraron juntos en la primavera del año 2014 un proyecto común para poner en valor los 20 pueblos y 3 ciudades (Ávila, Alba de Tormes y Peñaranada de Bracamonte) – con fundaciones teresianas estas últimas – por los que La Santa Andariega pasó dejando su huella hace más de cuatro siglos.

Crearon así, una ruta religiosa, turística, de naturaleza y cultural entre las provincias teresianas Ávila y Salamanca

Unos años antes, en el verano del 2013, este padre carmelita había recorrido estas tierras con un grupo de jóvenes, bosquejando un posible camino teresiano entre Ávila, dónde Santa Teresa nació y vivió la mayor parte de su vida y dónde comenzó la reforma del Carmelo.

El primer proyecto de ruta, con su marca e imagen, tipología y diseño de señalización. fue aprobado por parte de los padres carmelitas, así como la “Credencial del Peregrino” y “La Andariega”. Con la planificación de una primera ruta organizada abierta al público a finales de agosto del 2014, fue presentada al Área de Turismo de la Excma. Diputación de Ávila con el fin de encontrar apoyo en la puesta en marcha y en su difusión.

La ruta tuvo una gran acogida y desde la primera reunión, se conformó un equipo de trabajo tan diverso conformado por la orden de los carmelitas, los empresarios morañegos y las diputaciones abulense y salmantina. Varios años después, este trabajo se traduce en muchos kilómetros de peregrinos y turistas.

La Santa más andariega marcó toda una época. Ahora, esta ruta mística dinamiza un territorio muy desconocido por tierras morañegas y salmantinas.

Tras el paso de miles de peregrinos, botas desgastadas y pies heridos, aventuras burocráticas y humanas, rutas periódicas, colaboradores, ferias, encuentros profesionales y mucho esfuerzo y trabajo, os presentamos esta Ruta Teresiana y esperamos de corazón que la disfrutéis.

Kilómetros del futuro que queda por delante, como decía Santa Teresa: “… el Señor no mira tanto la grandeza de las obras cómo el amor con el que se hacen…” (Moradas 7, 4-15).